Paradójicamente, pienso que hay momentos en la que vida que por el simple hecho de vivirlos a uno le hacen sentir vivo. Tal vez sea esa la explicación al por qué la mayoría de las personas necesitamos salir fuera, viajar y vivir experiencias nuevas constantemente. Una necesidad que en cuanto satisfaces, aunque sea sólo una vez, automáticamente se convierte en una droga que te engancha y que muchos denominamos virus viajero. Un virus que te hace no querer parar de viajar ni cesar en la búsqueda de cosas espectaculares que hacer por el mundo una y otra vez.
Escenarios que te envuelven en un sueño. Rincones sacados de películas de fantasía y a veces llegando a parecer hasta irreales. Lugares espectaculares del mundo que con sólo visitarlos te hacen sentir especial, bajo una sensación indescriptible al sentir como todo lo que ves y experimentas se graba en tus recuerdos de forma indefinida.
Y es por eso, que he querido hacer una recopilación con algunos de esos instantes, situaciones y cosas que hacer y vivir al menos una vez en la vida, siendo dignas de ser marcadas en rojo en el calendario de la vida de cualquier persona.
Volar en helicóptero por las Cataratas de Iguazú
Poder ver desde el aire la garganta del diablo humeando entre la selva y contemplar semejante espectaculo de la naturaleza, Cataratas de Iguazú, como si un pájaro fuéramos es algo que jamás olvidaré. Tumbo a la derecha… tumbo a la izquierda… y mientras tanto, toda esa masa de agua, concretamente 12000 metros cúbicos de agua por segundo, cayendo bajo nuestros pies situados a más de 400 metros de altura.
Volar en helicóptero por las Cataratas de Iguazú es una de esas experiencias que toda persona debe vivir alguna vez en la vida.
Descubrir Machupicchu y el Valle de los Incas
Volar sobre los Andes hasta llegar a Cusco, subir en su tren panorámico hasta Aguascalientes, saborear la exquisita gastronomía peruana y subir hasta llegar al maravilloso valle de los Incas y Machupicchu, una de las nuevas siete maravillas del mundo y sin duda uno de los lugares más espectaculares del mundo.
Un lugar mágico, que el tiempo ha querido mantener casi intacto y que a día de hoy puedes pasear, explorar y descubrir sus misterios, historias y leyendas a medida que paseas por él.
Ver atardecer desde el mirador de los Andenes
Ubicado en la isla bonita, La Palma (Islas Canarias), el mirador de los Andenes logró sorprenderme y cautivarme como no recuerdo otro lugar.
Una experiencia inolvidable la de ver ese manto de nubes, con montañas que se transformaban en islas sobre un oleaje de nubes blancas que a medida que caía el sol tornaban a doradas.
Surcar en canoa los canales de Utrecht en la noche
Puentes iluminados, casitas iluminadas a pie de canal, el silencio de sus aguas con el único sonido de las burbujitas que se forman al pasar con la barca es una de las experiencias más espectaculares que he vivido. La paz y tranquilidad de los canales en la noche, tan sólo salpicada por la sorpresa de atravesar puentes iluminados y rayos de luz es lo más parecido a una película de fantasía que puedas ver.
El famoso Trajectum Lummen. Un recorrido inolvidable que te sorprenderá a cada remada que des con la barca por la Venecia holandesa.
Recorrer en elefante la ciudad de Ayutthaya (Tailandia)
Sin duda montar en elefante es de las cosas más divertidas que hacer en Tailandia y algo que si nunca has hecho deberías hacer y si es en un entorno como la ciudad de Ayutthaya mucho mejor.
Todavía recuerdo el contoneo de semejante bicharraco a medida que avanzábamos a más de 3 metros de altura mientras parecía señalar con la trompa las enormes construcciones de la ciudad tales como el famoso buda del árbol. Un rinconcito mágico, cargado de leyendas, que incluso viéndolo con tus propios ojos parece sacado de un cuento de fantasía.
¿Cómo puede haber acabado esa cabeza de piedra ahí?
Dormir a más de 3000 metros de altura y ver amanecer desde la tienda de campaña
Caminar un desnivel de casi 2000 metros, superarte mental y físicamente, cargar tu comida, tienda de campaña y vivir una experiencia en naturaleza como esta, ya sea en solitario o con amigos, de acampar bajo las estrellas con el único sonido del viento y un amanecer como el que veis con el sol asomándose poco a poco a través de un mar de nubes.
Dejar que los gorriones de Notre Dame te invadan
La primera vez que lo vi no podía creerlo. Siempre pensé que los gorriones eran unos bichos súper asustadizos y que a la mínima que te acercabas se iban volando. Pero no, al menos en París no. Y a las pruebas me remito.
Esta imagen que veis pertenece a un señor que alimentaba a gorriones mientras escuchaba música. Con unos auriculares, aislado del mundo y como si con él no fuera, decenas y decenas de gorriones le rodeaban por cabeza, brazos, hombros… mientras les alimentaba. Un espectáculo y una de esas cosas que deben experimentarse alguna vez en la vida!
Visitar los lagos Bachalpsee en Suiza
Esta experiencia sobre todo deben vivirla todas aquellas personas amantes de la montaña y la naturaleza. Enclavado en el valle de Grindelwald, en plenos alpes suizos y tras 2 horas de caminata rodeado de paisajes increíbles… voila!
El paisaje de paisajes y sin duda de los lugares más bonitos que he visto. Maravilla de la naturaleza que jamás olvidaré. Los lagos Bachalpsee.
Ver iluminado el árbol de Navidad del Rockefeller Center
¿Quién no recuerda la escena de Sólo en casa en la que se pierde en Nueva York y la madre lo recoge bajo el gigantesco árbol de Navidad del Rockefeller Center? Seguro que sí lo recuerdas. En Nueva York la Navidad es mágica y este árbol es el símbolo de ella y un lugar que no debes dejar de visitar al menos una vez en la vida.
Pasear por Jerusalén y flipar con su mezcla de culturas
Tener la oportunidad de dar un paseo en solitario por las calles de Jerusalén, sin ningún grupo de turistas a tu alrededor ni nadie que te hable ni distraiga. Tan sólo tú y el entorno.
Así lo viví yo. Fue un momento especial. Caminaba como si nada por el centro de la ciudad y de pronto, comenzaron a sonar las campanas de una iglesia. Acto seguido este sonido fue solapado por el de la llamada a la oración de las mezquitas mientras me cruzaba con un grupo de monjas y judíos ortodoxos vestidos de negro que esquivaban a unos coptos que por allí también andaban. Por un momento me pregunté que dónde estaba. Aquello era espectacular. Sin duda de los momentos más impresionantes que he vivido. Una mezcla de culturas fascinante. Cada una seguía su ritmo, estilo y tradición, y yo, allí en medio, contemplando tal espectáculo.
Conducir un quad por las dunas del Sahara
Libertad, disfrute máximo, adrenalina, velocidad, infinidad… todas esas palabras y muchas más podrían definir las sensaciones que vivimos al surcar el mar de dunas del desierto de Merzouga en Marruecos.
A medida que avanzábamos el paisaje iba transformándose. Las enormes subidas y bajadas por las dunas del desierto hacían que poco a poco fuéramos descubriendo paisajes nuevos, a cual más espectacular y una sensación de infinidad indescriptible.
Mojarte con ropa bajo la cascada de la garganta del diablo en Iguazú
Cuando visitamos cataratas de Iguazú tuvimos la suerte de que estas llevaban uno de los caudales de agua más grandes de su historia. Nada más y nada menos que 12.000 metros cúbicos por segundo. Una cantidad de agua impresionante que nos permitió el acercarnos a uno de los miradores de la garganta del diablo hasta el punto de ponernos como una sopa!
Dirás…: “Qué locura, acabarías empapado!” Pues sí, la verdad es que me calé hasta los huesos. ¡Y eso que era Invierno! Pero esa sensación de “me la sopla, que me quiten lo bailao”, de vez en cuando no viene nada mal y créeme que lo que allí nos reímos, bajo el agua de la cascada de la garganta del diablo… créeme que no tiene precio! Sin duda de las cosas más divertidas que se pueden hacer. Te lo aseguro.
Sentirse un gladiador en el coliseo de Roma
Caminar por los pasillos del coliseo, conocer su historia desde dentro e imaginar el rugir de un público sediento de sangre y espectáculo en un entorno como el coliseo de Roma convierten la visita al coliseo de Roma en uno de los motivos por lo que convierten este escenario en una de las nuevas 7 maravillas del mundo y una de los viajes que se deben hacer alguna vez en la vida.
Subir en el tren cremallera de los Alpes hasta el Top of Europe
El famoso tren del Jungfraujoch. Una de las obras de ingeniería más espectaculares del mundo. Un tren cremallera que avanza a través de los Alpes, surcando bosques, túneles escavados en montañas, salvando desniveles increíbles e incluso glaciares.
Subir allá arriba, divisar el graciar Aletsh y toda la inmensidad de los alpes es… una experiencia única, algo cara, pero que de verdad merece la pena. ¡No te olvides de mandar una carta de allí arriba! Es de las oficinas de correos más altas del mundo!
Ir a un musical de Broadway
Poder asistir a una obra de teatro en algún teatro de Broadway es todo un clásico de la gran manzana y bajo mi punto de vista una de esas cosas que deben poder hacerse alguna vez en la vida.
19 teatros nada más y nada menos con un repertorio espectacular con artistas de todo el mundo que representan puestas en escena tan espectaculares como Cinderella, el Fantasma de la Ópera, Spiderman, Mary Poppins o la que yo tuve la suerte de presenciar y que es todo un espectáculo: el Rey León.
Dormir en jaima en el desierto
Adentrarse en las dunas del desierto, dejar caer la noche en él, cenar al ritmo de una fiesta de tambores, contemplar el espectacular cielo de estrellas del desierto y finalmente marchar a una jaima, tapado en mantas, con el único sonido del viento mientras marchas a dormir en jaima sabiendo que alrededor de ti tan sólo hay un mar de dunas.
¿Apetece vivir esto no?
Ir a una misa Gospel
Seas religioso o no… créeme, hacer una visita a una misa Gospel es algo que cuanto menos te pondrá los pelos de punta en algún momento. Es alucinante el nivel musical que tienen algunos cantantes de estas iglesias. Te sorprenderá como te aceptarán según llegas, la forma en que se desarrollan los ritos en la iglesia y el ambiente tan fantástico y de buen rollo que allí se respira.
Contemplar Rio de Janeiro desde lo alto del Corcovado
El cristo corcovado, uno de los iconos de Brasil y actualmente una de las nuevas 7 maravillas del mundo. A 710 metros de altura podría decir que es uno de los miradores más espectaculares del mundo. La estatua del cristo redentor mide nada más y nada menos que 40 metros (unos 12 pisos). Dicen que sus manos apuntan a 2 de las pasiones de los cariocas. La primera hacia el Maracaná, el fútbol, y la segunda, hacia Copacavana, las playas, mientras su rostro apunta hacia el horizonte, el pan de azúcar y todos los cerros que forman la ciudad de Rio de Janeiro.
Subir al cristo Rey es toda una experiencia inolvidable y desde luego que espectacular. Muy espectacular.
Bañarse en las cristalinas aguas de Isla Mujeres
Que el color del mar caribe es único no es nada nuevo pero si de verdad quieres vivirlo en toda plenitud, ese lugar es Na Balam, al norte de Isla Mujeres, en la península de Yucatán, México. Uno de los lugares más paradisíacos del mundo que te dejarán boquiabierto. Allí el agua a penas superará tu cintura y extendiéndose por centenares de metros, un paraíso de turquesas y peces tropicales te rodeará casi sin darte cuenta.
Volar como Peter Pan en un túnel de viento
Flotar, abrir los brazos y sentir como te elevas como Peter Pan. Una experiencia fascinante y una de las sensaciones más alucinantes que se pueden vivir y que podrás experimentar en un túnel de viento como este en el que me metí en Gerona.
Contemplar una lluvia de estrellas en plena naturaleza
Dejar caer la noche, coger abrigo, un cojín para el cogote, una pequeña manta y buscar la oscuridad absoluta en algún paraje natural donde observar las estrellas. Una experiencia única que te tras unas pocas horas te hará volar por el cosmos.
Y así lo hicimos nosotros, desde lo alto del pico Veleta en Sierra Nevada o tal como veis en la fotografía desde las faldas del Teide, en las cañadas del parque natural que llegada la noche es un paisaje absolutamente de Marte!
Navegar y comprar en un mercado flotante
Este tipo de mercados puedes llegar a verlos en países como Tailandia o Vietnam. Es una pasada el poder ver como preparan la comida a bordo de sus barcas, como se comercia desde ellas y la forma en que distribuyen los puestecitos de fruta.
Atravesar los canales de un mercado así es una experiencia súper divertida que recomiendo hacer sin ninguna duda!
Pasear los palacios de la Alhambra en la noche
La Alhambra, qué decir de ella. Una de las aspirantes que quedó a las puertas de convertirse en una de las nuevas 7 maravillas y que si ya de día es espectacular, su visita en la noche… qué decir! Pasear los pasillos de sus palacios iluminados es una experiencia alucinante. En la noche, con las luces, algunos rincones de la Alhambra parecen distintos, el sonido de los pasos de la gente pasando por ellos los hacen místicos y nuevos colores parecen aflorar de sus paredes con caprichosos juegos de sombras y la luz de la luna en el caso de que hagas coincidir tu visita con esta.
Montar en bicicleta eléctrica por Holanda
Si montar en bicicleta ya es una gozada, ¿habéis probado alguna vez una bicicleta eléctrica? Es una pasada que hay que probar y hacerlo en el país de las bicicletas, como es Holanda, mejor que mejor.
Nosotros la disfrutamos en Utrecht, para mi gusto mucho mejor que Amsterdam para poder disfrutar de “el cacharrito”, de modo que ya sabes, otra de esas cosas que no perderse y lugares que visitar alguna vez son Utrecht y una buena bicicleta y si es eléctrica mejor!
Montar a camello al amanecer por el desierto
Despertar en una jaima, tomar un breve pero abundante desayuno aún con la luna sobre nosotros, subir a un camello y dejar que sobre este, la luz del alba, comience a iluminar tus pasos a medida que avanzas entre dunas y estas poco a poco tornan a dorado. Creeme que el desierto a esa hora es de las cosas más bonitas que se pueden ver en la vida y una experiencia que jamás olvidarás.
Caminar entre valles en busca de la casita de Heidi
Visitar la casita de Heidi en Suiza tan sólo es la excusa de caminar durante 2 horas mientras atraviesas praderas increíbles, valles de infarto y paisajes salpicados por casitas de postal que convierten la experiencia de subir a la casita de Heidi en toda una experiencia!
Comer un gofre en Bruselas!
Una de las cosas que comer alguna vez en la vida es un señor gofre en cualquier lugar de Bruselas, ya sea con nata, fresas, chocolate, plátano, nata, nutella… ¡lo que quieras!, ¡allí todos están buenos!
Probar un kayak transparente por aguas cristalinas
Si ya de por si navegar es divertido… ¡imagina la experiencia de probar un kayak transparente!
La sensación de ir en él sobre el mar es indescriptible. Subido a uno de ellos te sientes como si fueras sentado directamente sobre el mar. Es chulísimo. A medida que avanzas ves pasar bajo ti mismo a peces, arrecifes y plantas marinas. ¡Una pasada!
Volar en globo y flotar sin el ruido de un motor
Otra de las cosas que alguna vez se tienen que hacer es cómo no un vuelo en globo. El hecho de flotar sin el sonido de ningún motor… sentir como un bicho tan enorme se desplaza por el cielo a ritmo de viento… en fin, qué os voy a contar. Paisajes de cine y una actividad divertidísima sobre todo al aterrizaje!
Darte un homenaje con alguna de las mejores hamburguesas en Nueva York
Si eres un amante del fast food, comilonas de las guarrindongas, de ponerte hasta arriba de comida rápida y te apasionan las hamburguesas… entonces no puedes pasar por alto una buena hamburguesería de Nueva York, sin duda una de las cosas que probar alguna vez y que cambiarán tu concepto de hamburguesa cada vez que visites un McDonalds o Burguer King, jejeje.
Averiguar qué es la “hora mágica” o “Golden hour” en Sevilla
¿Aún no sabes qué es la hora mágica? Pues no hay mejor forma de responderte a esta pregunta que llevándote a una de las mejores horas mágicas del mundo, en mi ciudad, Sevilla. Espera justo unos minutillos después de ponerse el sol y alucina, ya sea en el puente de Triana o en la mismísima Giralda.
Un viaje que tienes que hacer alguna vez en la vida porque no es porque sea mi ciudad pero… en fin, una imagen vale más que mil palabras y creo que con lo que os enseño os doy motivos suficientes como para que vengáis a disfrutarla.
Galopar a caballo por la orilla del mar
Sentir el galopar de un caballo con su majestuosidad con la brisa del mar a medida que avanzas por la orilla. Divisar la playa, el agua del mar, la arena y sentir el viento a medida que avanzas a más de metro y medio de altura a lomos de tu caballo una de las mejores experiencias que se pueden vivir.
Ver el sfumatto de Leonardo desde el mirador de San Michelangelo
Comprueba con tus propios ojos por qué Leonardo se enamoro de Florencia y comenzó a pintar el sfumatto desde uno de los lugares más romanticos del mundo, el mirador de San Michelangelo, en Florencia.
Dejar correr el tiempo mientras flipas con las luces de Times Square
No lo dudes. Llega a Times Square, siéntate en uno de los graderíos del TCKT y deja correr el reloj pensando el lugar en el que te encuentras y flipando con lo que el marketing y el ser humano son capaces de hacer elevándolo a la máxima potencia.
Sobrevolar la gran manzana en helicóptero!
Poder dejar como a enanitos a los gigantes de Manhatthan en helicóptero. Atravesar el rio Hudson dejando abajo a la estatua de la libertad y ver desde el aire las grandes avenidas de Nueva York es toda una experiencia.
Perspectivas únicas de una de las ciudades más impresionantes del mundo como es Nueva York y su espectacular skyline que desde el cielo mola muchísimo.
Pasear por los mercadillos de Navidad de centroeuropa
Ya puedes ser el mismísimo Grinch de la Navidad que te aseguro que los coquetísimos mercadillos de Navidad de centroeuropa no te dejarán indiferente y de algún modo reavivarán el verdadero espíritu de la Navidad. Principalmente destacaría una visita a los mercadillos de la plaza del reloj de Praga y sin duda la del Ayuntamiento de Viena, es uno de esos lugares donde sentir auténtica magia con inmensos árboles decorados con luces de colores y adornos enormes de navidad por todos lados. Una maravilla.
Tomar un té al atardecer de Üsküdar
Entre Asia y Europa, tumbados sobre cojines árabes, todo el Bósforo frente a nosotros, un té en mano y el sol poniendose tras las alucinantes mezquitas de Estambul… ¿hay mejor plan? Creeme, una experiencia de 10 que jamás olvidarás.
Sentir vértigo en la habitación de cristal de la Willis Tower de Chicago
Si ahora me preguntaras por una de las cosas más divertidas que hacer en el mundo, rápidamente te diría que esa es visitar la habitación de cristal de la Willis Tower de Chicago o antiguas Torres Sears.
Llegar allí y poder caminar por un suelo transparente a más de 400 metros de altura viendo como pasan bajo tus pies minicochecitos que parecen de juguete y puntitos negros con piernas a modo de liliputienses… buaaaaj!!! qué vertigo!
No os lo podéis perder. Imposible!
Descubrir el misticismo del Monte Saint-Michel
Pasear el interior de la abadía del Monte Saint-Michel, ver subir y bajar sus mareas desde sus miradores y alucinar con un lugar tan fantástico como el monte San Michel son suficientes razones para incluirlo en esta lista como lugares que ver sí o sí en algún momento de nuestra vida.
“Dentro de veinte años estarás más decepcionado por las cosas que no hiciste que por las que sí hiciste. Así que suelta las cuerdas de tus velas.
Navega más allá del puerto seguro. Atrapa los vientos favorables en tus velas.
Explora. Sueña. Descubre”.
(Mark Twain)
Información práctica si quieres vivir estas experiencias
En el siguiente mapa de Google Maps hemos colocado cada uno de los lugares a los que pertenece cada experiencia para que puedas echar un ojo a ver qué experiencia o lugar te pilla más cerca e ir cumpliendo una a una todas las experiencias!
Por otro lado, si no conoces la comunidad viajera de minube.com, lo siguiente te interesa
Buenas experiencias, algunas ya las viví y son altamente recomendables. ¿Dónde quedó el tomarse un serranito en Sevilla? También añadiría tirarse en paracaídas jeje
¡La madre de Dios! Qué envidia…
Te falta ir de pintxos por Donostia. Invitado quedas ;)-
Un post absolutamente espectacular. Enhorabuena. Me apunto unas cuantas que no he hecho…
Abrazo
Qué pasada y qué buenas ideas!! Me apunto muchas de ellas. Y la idea del post también, que me ha encantado!! 😛
Ya te preguntaré algunas cosillas la próxima vez que nos veamos!!
Me alegra mucho de que os guste! 🙂
Si me permites la nº 38: es sentarte al filo de la cascada Dettifoss en Islandia y contemplar la fuerza y viveza de la inmensa masa de agua. Sientes como una atracción hacia una auténtica maravilla de la naturaleza http://randomstory.org/ten-the-most-amazing-and-beautiful-waterfalls-on-earth/11-15/
Fantásticas Edu! Gracias por el aporte! 🙂
Impresionante post Miguel!! De lo mejor que he visto últimamente!! Y me has motivado a hacer todas las que me falten 🙂
Gracias por inspirarme!
Gracias a ti Inés! De eso se trata 🙂 De animar a todo el mundo a liarse la manta a la cabeza y empezar a vivir momentazos como estos 🙂
Una pasada…!! Es lo único que puedo decir, yo estoy replanteándome vivir la vida de otra forma tras sufrir algunos percances de salud… Así pues pienso viajar todo lo que pueda… Gracias por los consejos..
Gracias, Miguel.
Una pregunta: ¿Dónde encontraste un kayak transparente para alquilar? Hace tiempo que busco uno.
Bañarse de noche en un mar tranquilo con fosforescencias que brillan en la oscuridad (como yo hice en Senegal) también sería una experiencia digna de esta lista…
En el propio artículo tienes un enlace a un rincón de minube donde encontrarás la empresa para hacer kayak transparente en Menorca. Se llama DMS Sport&kayak. Diles que vas de parte del blog de viajes de Diario de un Mentiroso, no lo olvides!
Me puedes explicar cómo has conseguido hacer tantas cosas tan joven? ¿Cuál es tu secreto? Porque te has convertido en mi ejemplo a seguir! Fantástico post.
El único secreto es llevar siempre por delante un «por qué no?» ante todo lo que te propongas 😉