Uno de los platos fuertes de nuestro viaje por Jordania era sin duda el hacer un vuelo en globo por Wadi Rum, uno de los desiertos más imponentes y majestuosos del mundo (como diría mi amigo Javi) y que si a ras de suelo ya lo veíamos espectacular… no podíamos ni imaginar con cómo sería a vista de pájaro con la luz del amanecer.
A caballo pasado puedo decir que la experiencia del globo en Jordania ha sido una de las más increíbles de mi vida viajera. Una de esas vivencias de coleccionista para guardar en la maleta para siempre. Sus paisajes, sensaciones y momentos vividos allá arriba difícilmente los podremos olvidar.
Y es que, ahora, recordando lo que allí vivimos, no nos extraña que Ridley Scott se fijara en estos paisajes para rodar su película Marte ya que para nosotros fue algo así, ¡fue como sobrevolar otro planeta! 😀 Y no, no exageramos. Pero bueno, como una imagen vale más que 1000 palabras, no me enrollo más y os invito a que comprobéis vosotros mismos todo esto que os estoy contando porque este reportaje de Jordania viene cargadito de paisajes de esos que cortan el hipo. ¡Avisados quedáis!
4:00 am… ¡madrugando que es gerundio!
La aventura arrancaría súper temprano. A eso de las 4 de la mañana, en nuestras jaimas en mitad del desierto de Wadi Rum, sonaría nuestro despertador en mitad de una orquesta de ronquidos de mis queridos Javi y Manolito y un precioso manto de estrellas.
Con más sueño que el vecino del de Bricomania, recogimos los petates y como zombies nos subimos al 4×4 de nuestro guía en dirección al puesto fronterizo de Rum donde nos esperaría otro 4×4 que nos llevaría hasta el punto de despegue de nuestro globo por el desierto de Wadi Rum a través de carreteras como esta.
Tras probar varios sitios, la meteorología parecía querer resistirse en cuanto al viento… pero finalmente, Khaled, nuestro piloto, encontró un sitio apropiado para el despegue y rápidamente empezaron a desplegar las velas de nuestro globo.
En menos que canta un gallo desplegaron la cesta, sacaron quemadores y cuando quisimos darnos cuenta el ruido de los ventiladores ya estaba en marcha para calentar al monstruo flotante que nos transportaría por los cielos de Wadi Rum. ¡Menuda emoción!
Aquí nos tenéis, dentro de nuestro globo jordano. ¡Gigante! Y un globo del Cádiz, como dice mi amigo Javi 😀
Pasados unos minutillos, el globo se colocó en posición vertical y rápidamente nos llamaron para que subiéramos a bordo. Nuestro hype en ese momento como os podéis imaginar era máximo. No todos los días se vive algo así y mucho menos en un viaje en globo por el desierto de Wadi Rum. ¡Estábamos a puntito de vivir uno de los mejores vuelos en globo del mundo según los más viajados!
¡Señores esto arranca! 😀 Un conjunto de risitas nerviosas, bromas de última hora y consejos del piloto se fueron solaparon los unos sobre los otros. Yo no me enteraba de nada 😀 Lo único que quería es que aquello empezara a flotar de una vez. ¡Estaba deseando ver Wadi Rum desde las alturas!
¡Se levanta, esto se levanta! Jajaja 😀 Para mi iba a ser la tercera vez que hacía un vuelo en globo y el hecho de saber lo que se siente al flotar en un bicho de estos ya lo conocía pero tanto para Javi como para Manolito era la primera vez y tal y como veis en el vídeo, las primeras sensaciones a bordo de un globo son geniales si nunca antes te has montado. Ausencia total de ruido (excepto del quemador), de viento y una curiosa sensación total de seguridad donde no se siente miedo a las alturas pese a estar super alto de todo 😀 Y os lo dice un tio con vértigo.
¡Esto despega señores…!, ¡esto despega…!
El quemador no paraba de rugir, la altura cada vez era más y más grande, poquito a poquito nos separábamos más y más del suelo y a medida que subíamos todo el paisaje de Wadi Rum poco a poco se iba abriendo a nuestro alrededor dejándonos con la boca abierta.
Poquito a poquito fuimos dejando a un lado el área de despegue y a partir de ese momento sólo el viento decidiría por nosotros el rumbo del globo en el que estábamos subidos 😀 Sí, sí, lo que leéis, ¡los globos no tienen volante!
El amanecer se desvanecía por minutos y el sol poco a poco comenzaría a pegar fuerte sobre el desierto de Wadi Rum. A medida que subíamos, atravesábamos de lado a barrancos y cortados espectaculares. ¡Menudo momentazo! Fijaos la sonrisa de oreja a oreja que no estaba dibujando el momento. Éramos los tres tíos más felices de Jordania sobrevolando en globo Wadi Rum, ¡todo un sueño viajero!
A medida que avanzábamos el coche escoba nos seguía a todos lados como medida de seguridad durante toda la excursión en globo por Wadi Rum, y de paso, nos servía de referencia para saber la altura a la que estábamos en ese momento 😉
Fijaos cómo de pequeñita quedabala sombra de nuestro globo en ese gigantesco salar seco del desierto. ¡Alucinante!
Pero si creíamos que ya estábamos suficientemente altos, de pronto, Khaled, nuestro piloto, empezó a meter caña al globo y poquito a poquito fuimos dejando a los coches escoba como Micromachines en la orilla de una playa…
… hasta el punto de pasar de Micromachines a píxeles en un paisaje desolador! ¿Veis los coches en la imagen no? Podéis hacer click si queréis para ampliarla.
Y hablando de Khaled, nuestro piloto… ¡menudo personaje! Un tio súper viajado, con muchísimos años de experiencia haciendo paseos en globo por Wadi Rum y os aseguro que un autentico crack de los globos.
Pequeñito pero matón. En mejores manos no podíamos estar para hacer semejante travesía por los cielos de Wadi Rum 😀
Un viaje a otro planeta a vista de pájaro
A medida que la mañana avanzaba, el sol iba impregnando el paisaje de nuevos colores y sombras mientras volábamos en globo por Wadi Rum. Fijaos qué maravilla 🙂
Por la zona de Wadi Rum poquitas poblaciones encontraréis pero abrid los ojos porque las pocas con las que os topéis, desde el globo, serán como portalitos de Belén en mitad del desierto.
Aquí nos tenéis mientras sobrevolábamos una de esas poblaciones y a mi amigo Javi que no se si estaba acojonao por la altura o es que estaba pidiéndoles un poco de Nutella a los de los pueblos de abajo 😀
Allá arriba, en silencio, nos preguntábamos cómo sería la vida en un lugar como este. Parece mentira pero desde arriba las cosas se ven distintas, lo ves todo como un “todo”. Ves esas casas ahí abajo y dices: “joder… está guay el paisaje pero… ¿me acostumbraría a vivir en un sitio así?“.
Pero fuera como fuere, lo cierto es que la experiencia nos estaba superando a los tres. Cada € invertido estaba mereciendo la pena. Postales a un lado y postales al otro.
No sabíamos hacia donde mirar. Apuntaras donde apuntaras aquello era un 360º de película y sino, decidme, ¿qué escena veis en la siguiente imagen?
¿Si os coloco al curiosity de la NASA y pongo el cielo rojo no podría haceros creer que esta estampa pertenece a Marte? Jajaja 😀
Películas como Misión a Marte (del año 2000), Planeta rojo (también del año 2000) y la archiconodida The Martian, de Matt Damon, fueron rodadas aquí por algo y no es de extrañar. Postproducción cero en un paisaje totalmente marciano donde no hay que añadir ni una sola piedra para hacer creer al espectador de que todo esto es Marte.
No exageraban cuando nos decían que hacer un vuelo en globo por el desierto de Wadi Rum era un sí o sí en Jordania. Fijaos qué maravilla de vistas.
Bajo nosotros 850 kilómetros cuadrados de arenas nos observaban, enormes montañas de arenisca, granito y pizarra nos flanqueaban de lado a lado. Y aunque algo más escasas, también dunas, gigantescos mares de dunas que aguardaban nuestro descenso.
Y cómo no, sus espectaculares y kilométricos salares secos. Interminables llanuras de arena fina que a día de hoy yacen como fósiles secos y que desde el aire parecían lienzos en blanco sobre los que la naturaleza, caprichosa, garabatea arbitrariamente grietas, líneas y montañas a su antojo. Fijaos qué flipe 🙂
Darse el capricho de vivir un paseo en globo por Wadi Rum es una experiencia para los sentidos. Sentir el silencio, la inmensidad y espectacularidad de estos paisajes allá arriba no tiene precio. Pocos lugares en el mundo pueden competir con este viaje en globo. Tal vez Capadoccia, el Gran Cañón o el Myanmar, me atrevería a decir.
Tras hora y media de vuelo, la aventura llegó a su fin, y con ella, un sueño viajero que llevaba muchísimo tiempo queriendo hacer. Ya lo he dicho mil veces… Jordania es un antes y un después para todo viajero que se precie 🙂
Vídeo de nuestro vuelo en globo por Wadi Rum
Por aquí os dejo un vídeo cortito, de unos 3 minutitos, de nuestro vuelo en globo por Jordania. Espero que os guste y os termine por arrancar de la silla a vivir algo así! Merece la pena un montón 😉
Información práctica para volar en globo en Wadi Rum
A continuación he hecho un recopilatorio de las preguntas que más me hacéis por mi página Facebook como por ejemplo dónde volar en globo en Jordania, precios, con qué empresa lo hicimos nosotros, etc….
¿Con qué empresa hicistéis el vuelo en globo por Wadi Rum?
La empresa se llama Rum Balloon y abajo tenéis sus datos de contacto 😉 Lo ideal es que una vez en Jordania les llaméis por teléfono. Hablan inglés perfectamente. Su web creo que actualmente no funciona, sólo el Facebook.
¿Si tienes vertigo es recomendable? ¿Pasaste miedo?
Yo soy el tio con más vértigo del mundo y os aseguro que en los vuelos en globo no se pasa ningún vértigo. Una cosa es el vértigo y otra el miedo a las alturas.
¿Cuánto os costó? ¿Merece la pena pagar tanto?
El precio es caro… son unos 180€. Y sí, es un dineral… pero señores, lo he dicho una y mil veces: “las experiencias y las oportunidades, las pierdes y el dinero, tal como va, viene…“. Yo en este tipo de experiencias tiro la casa por la ventana.
Dedicado a mis amigos Javi, Manolito y a mis amigos de Gloobo, de Sevilla, por transmitirme su pasión por los globos. Aquí os dejo el vídeo que les hice