Un día en Preikestolen, el Púlpito de los Fiordos Noruegos

Uno de los grandes días de nuestro viaje por Noruega había llegado. Era el día de subir al Preikestolen. El pulpito de los fiordos noruegos. Ese enorme masacote de piedra con nada más y nada menos que 600 metros de altura que los convierte en el mirador de miradores y sin lugar a dudas uno de los lugares más bonitos y espectaculares del mundo que para todo viajero empedernido, es un auténtico sueño y en mi caso… una auténtica “ob-se-sión”.

Preikestolen, el púlpito de los fiordos de Noruega

Llevaba semanas mirando previsiones meteorológicas para este día. La importancia de pillar un día claro allá arriba era clave, ya que son muchos los viajeros que se pegan la paliza de hacer la ruta al Preikestolen y no ver nada debido a la niebla. Esto que os cuento es algo más común de los que parece y un auténtico putadón. Por esta razón, quisimos ser precabidos teniendo en cuenta la “cambiante meteorología noruega” y dedicamos 3 días de margen en la zona de Stavanger para disfrutar de uno de los caprichos más maravillosos de la naturaleza y de los lugares más bonitos de Noruega.

Divisando el maravilloso Preikestolen y el fiordo Lysefjord desde el mejor mirador en la parte superior de la zona

La mañana arrancaba fresca y con la mayor de las incertidumbres, abrimos las cortinas de nuestra habitación a la espera de encontrar un día soleado que nos permitiera subir hasta el Preikestolen. Con un jiñe tremendo corrimos las cortinas y… ¡voila! ¡era el día perfecto! ¡Las previsones se cumplían! Un cielaco limpio nos daba los buenos días junto a una suave brisita que nos empujó de cabeza hasta el puerto de Fiskepiren de Stavanger, lugar donde arrancaría la aventura de ir al Preikestolen y vivir uno de los días más gloriosos para todo viajero!

Celebrando el ascenso al Preikestolen

¡De ferry a bus y tiro porque me Preikestolhytta!

Ya en el puerto de Stavanger, compramos un billete combinado de ferry a Tau + autobús a Preikestolhytta (punto de partida de la ruta) que es sin duda la forma más económica de gestionar el transporte hasta el punto donde se comienza a subir hasta el Preikestolen.

Ferry de Tau a Stavanger para ir luego en autobús hasta Preikestolhytta

En mitad de un jaleo tremendo de camiones, furgonetas y coches que viajarían con nosotros hasta Tau, subimos a bordo del ferry para empezar una pequeña travesía de 30 minutos aproximadamente hasta el puerto de Tau.

Una vez en el ferry, el trayecto por la bahía de Stavanger fue espectacular…

En el ferry de Stavanger a Tau

Multitud de islitas desperdigadas por todo el pueblo nos saludarían bajo un día maravilloso y auténticas imágenes de postal.

Casitas de Noruega en la bahía de Stavanger

Entre paisaje y paisaje el recorrido se nos pasó volando y cuando quisimos darnos cuenta ya estábamos de camino en el autobús hasta Preikestolhytta a través de una preciosa carretera que bordearía el mar y atravesaría preciosos bosques de abetos. Ay Noruega, Noruega… ¡qué maravilla!

Islas que llenan la bahía de Stavanger

Empezamos el pateo… ¡camino a Preikestolen!

Una vez en Preikestolhytta, nos bajamos del bus y lo primero que hicimos fue echar un ojo al último autobús que nos llevaría de vuelta desde Preikestolhytta hasta el puerto de Tau. No era plan de liarla y apurar hasta el punto de quedarnos en tierra y tener que empeñar las latas y embutidos que traíamos de Mercadona para poder volver a Stavanger 😀 Una vez claritos los horarios, que los podréis ver en una serie de carteles junto a las paradas, deberéis buscar el siguiente punto de partida donde tendréis que haceros la foto del “ANTES DE SUBIR AL PREIKESTOLEN”, tal que así. Hacerme caso y hacérosla… lo mejor será la del “DESPUÉS”, jejeje…

Inicio de la ruta al Preikestolen

Tras la fotito de rigor, la subida al Preikestolen comenzaría a través de una serie de bosques preciosos, empinados senderos llenos de escaleras empedraras y unas vistas preciosas con la bahía de Stavanger al fondo.

Comienzo de la ruta al Preikestolen por la conocida zona como Bounder Hill

Un comienzo de ruta algo exigente para empezar a través de la conocida como Boulder Hill pero muy, muy divertido… en un entorno… espectacular.

Neverdalsskaret en Noruega, cerca del Preikestolen

Aquí os dejo con nuestra primeras impresiones nada más empezar la ruta. Es muy importante la visualización de este vídeo y que tengáis en cuenta que nos encontrábamos bajo niveles muy altos de McDonalds en sangre y bajo la inercia del sillónball.

Como veis en el vídeo, el camino… ¡nos lo comíamos con papas! jajaja y tras unas 2 o 3 subiditas de piedras más… llegamos hasta una zona pantanosa que fuimos atravesando a través de una plataforma de madera rodeada por una zona de bosque de impronunciable nombre: “Krogebekkmyrane”. En Noruega Barrio Sésamo debe ser la leche.

Krogebekkmyrane una de las zonas más bonitas que encontramos camino del Preikestolen

Tras la zona pantanosa… ¡de nuevo a la carga por unas espectaculares escaleras rocosas!

Neverdalsskaret, las escaleras de piedra que subimos para llegar al Púlpito

Son las conocidas como Neverdalsskaret. De los momentos más chulos del camino que nos darían como premio las primeras vistas de un tímido fiordo Lysefjord que a medida que continuáramos el camino al Preikestolen se iría haciendo más y más presente en la ruta.

Primeras vistas del fiordo Lysefjord

A medida que avanzábamos los puntos panorámicos fueron apareciendo poco a poco de manera intermitente y la ruta olía cada vez más fuerte a Preikestolen.

Divisando la bahía de Stavanger desde los alto del Preikestolen

De pronto, tras atravesar un pequeño bosquete de abetos, nos topamos con los preciosos lagos de Tjødnane y lo que parecía un Aquopolis improvisado con un montón de gente bañándose.

Lados de Tjødnane donde poder bañarse camino al Púlpito

¡Una pena que no lleváramos encima el bañador! Así que ya sabéis, a menos que no os importe bañaros en ropa interior o en pelotas, que no se os olvide el bañador en vuestra subida al Púlpito si queréis pegaros un chapuzón antes de visitar el Preikestolen!

Frente a uno de los lagos de Tjodane camino del Preikestolen

Y de los lagos, pasamos a unos peliagudos tramos que el camino tenía preparado para nosotros con empinadísimas barandas de cuerdas que pondrían a prueba tanto a nuestro vértigo…

Camino hacia el Preikestolen

Como a nuestras retinas con las primeras imágenes del fiordo Lysefjord! Qué maravilla. Desde luego que no hay mejor gasolina en rutas como esta que la de pasear por entornos tan espectaculares como este.

Fiordo Lysefjord y el entorno de Preikestolen

Cumpliendo un sueño llamado Preikestolen

El camino poco a poco fue allanándose. A medida que avanzábamos la vegetación empezó a desaparecer y el camino empezaría a estrecharse con enormes precipicios de cientos de metros y cortes en el suelo, más que alucinantes, que mostrarían las tripas del avismo a aquellos valientes capaces de asomarse en ellas. La subida al Preikestolen estaba llegando a su fin y todos los allí presentes lo sabíamos. El mirador de miradores pronto haría aparición por primera vez en nuestras retinas 🙂

Panorámica en el Preikestolen

Y así fue. Ahí estaba. Mágico e imponente. Abarrotado de gente pero solitario. El púlpito de los fiordos noruegos. El maravilloso Preikestolen.

Postal del Preikestolen

Fue verlo y automáticamente querer pisarlo. Por un momento olvidé mi vértigo y esas estampas de pies colgando de sus aristas que tantas veces había visto con tembleque en revistas para correr y querer ir a hacerlo. ¡Estábamos cumpliendo un sueño!

Las vistas del fiordo Lysefjord desde allí arriba eran aún más maravillosas si caben que desde otros puntos de la ruta.

Espectacular panorámica del fiordo Lysefjord

Como un enorme rio penetrando entre montañas llenas de brumas el maravilloso Lysefjord se perdía entre enormes montañas. Absoluta magia para las retinas.

Fiordo Lysefjord

¿Qué sentimos al caminar por él? Particularmente podría definirlo como el caminar por encima de un gigante de piedra. Pisas esas rocas, te paras a pensar y te dices a ti mismo: “tio, estas caminando por el púlpito… el pulpito!!!”. Podréis llamarme tonto pero no sabéis la de tiempo que había soñado poder alucinar en un lugar como este tal y como lo hicimos.

Posando en el borde del Preikestolen

Más de 600 metros de altura y una base de apenas 25 metros por 25 metros en la que se puede ver a todo tipo de personajillos desafiar al vértigo.

Asomados en el Preikestolen

Más de 200.000 personas visitan este enorme pedrolo al año, demasiadas personas para los pocos accidentes en el Preikestolen que se registran. En concreto sólo ha habido uno, precisamente de un español en un intento fallido de hacerse una fotografía. Mucho cuidado amigos, esto no es ninguna broma. La caída es brutal y el “yo controlo” pasa factura.

Gente caminando encima del Preikestolen

Aún así… la originalidad que permite el Preikestolen, el considerado por muchos como mejor mirador del mundo, es bárbara.

Preikestolen, el mirador más espectacular del mundo

Hay pocos lugares del mundo donde sentirse un pájaro simplemente por el hecho de sentarse en ellos.

Mujer con los brazos abiertos mirando al Preikestolen

Es acercarte a su borde, abrir los brazos y sentirte como un pájaro volando sobre el fiordo Lysefjord. ¡Qué sensación…!

Con los brazos abiertos en el borde del Preikestolen

En pocos lugares del mundo puedes hacerte fotones tan maravillosos y espectaculares com este. Parece un maldito copy&paste obra de Photoshop. No me digais que no.

Diana saludando desde lo alto del Preikestolen

Y ni que decir de la impresión que te entra por el cuerpo al sentarse en su borde… dioooosss…!!!!!

Sentados en el borde del Púlpito

Precisamente esta era la gran pregunta. La pregunta del millón. Recordad que soy un tío con vértigo. Que no es lo mismo que miedo a la altura. Vértigo es igual a mareo. Te vuelves torpe. Todo te tiembla y el miedo se crea al consciente de esa situación en un lugar donde puedes matarte. Pues bien… si me preguntáis: ¿Se pasa vértigo en el Preikestolen? La respuesta es relativa. De primeras te llevas una impresión de cojones pero luego te sientas al lado, te acostumbras, te vas acercando y lo haces. Mucho yuyu. Para los que tenéis miedo a la altura… en fin. ¡Creo que no es vuestro sitio!

Más felices que unas pascuas sentados en el borde del Preikestolen

Fijaos qué lugar y lo pequeñito que quedo comparado con el resto del fiordo (sí, el monigote de la imagen soy yo).

Posando desde el Preikestolen en junto al fiordo Lysefjord

La espectacularidad de estas fotos no son debidas a la cámara. No es el ojo del fotógrafo. Es sencillamente mérito del lugar. No hay más.

Sentada y saludando con los brazos abiertos desde el borde del Púlpito en los fiordos de Noruega

Atentos al alucinante precipicio del Preikestolen. Es que es A-C-O-J-O-N-A-N-T-E. Fijaos como de chiquitito se queda el barco por las aguas del fiordo.

Perspectiva vertical del Púlpito

Aquí tenéis a Manolito haciendo de Cristobal Colón desde lo alto del mismísimo Púlpito. Repito, fijaos la proporción del Púlpito… ¡qué locura!

Señalando como Cristobal Colón en lo alto del Pulpito con el fiordo Lysefjord abajo a la izquierda

En la parte izquierda del Preikestolen encontraréis un pequeño mirador casi a la altura del propio Púlpito y desde el que podréis apreciar la gigantesca caida del bicharracho donde sacar las mejores fotos del Preikestolen.

Preikestolen en Noruega

Montando un chiringuito en el Púlpito

Y entre fotos, más fotos, vertiguillos, vistas y fiordos… llega el turno de llenar el gaznate, que el hambre aprieta y que mejor que poner remedio a esto que con un señor bocadillo de jamón de Mercadona el mejor amigo del viajero lowcost por Noruega para toda subida al Púlpito que se precie.

Jamón de Mercadona en el Preikestolen

Un momento de comida, muy ameno, con jamoncito der güeno que sería la envidia de los guiris allí presentes y que cargado de risas darían paso a nuestras célebres sobremesas noruegas. Muy atentos.

Subiendo al mejor mirador del Preikestolen

Tras exprimir nuestras retinas sobrela base del Púlpito, decidimos explorar una zona superior en busca del conocido como mejor mirador del Preikestolen.

Uno de los miradores más espectaculares hacia el Preikestolen

Muchos zoquetes, que no tienen otra palabra, empezaron a escalar por una zona absolutamente de locos sobre una pared literalmente vertical expuesta sobre el abismo. Delante mía casi se parte la crisma una señora de avanzada edad… Pero tranquilos, no hace falta estar tan loco. No, no es necesaria tal barbaridad para disfrutar de unas vistas guays. Para subir a este mirador sólo deberéis retroceder un poquito por el camino por el que llegásteis al Preikestolen y tirar hacia la zona superior donde encontraréis uno de los mejores lugares para ver el Preikestolen. Fijaos qué maravilla de lugar.

El mejor mirador del Preikestolen

Hay quienes opinan que estas vistas son casi más bonitas que las que se tienen desde la propia base del púlpito. Pero bueno, independientemente de esto, desde luego, una de las mejores imágenes del Preikestolen las tenéis aquí donde a mi modo de ver es el mejor lugar para llevarse un recuerdo imborrable del Púlpito 🙂

Diario de un Mentiroso en el Preikestolen

Un lugar donde vivir un auténtico momento reflexión frente a una de las mejores vistas del Preikestolen. Donde echarse al solecillo, pillarse una chocolatina, no pensar en nada, respirar aire puro y sentirse libre a tope.

Panorámica vertical del Preikestolen

Pero la zona superior del Preikestolen no son sólo de miradores sino también impresionantes barrancos que os dejarán con la boca abierta y en los que no pudimos evitar detenernos para lanzar algún que otro “pedrolo” para comprobar su altitud del bicharraco. Sí, no nos bastaba con ver que estabamos a tomar por c*lo de alto sino que debíamos escuchar el “pum, pam, catapramm” de un pedrolo. Somos así de retarded.

Hasta luego Preikestolen

Y tras hincharnos a tirar piedras y disfrutar de las últimas estampas del Preikestolen, seguimos subiendo sin ni siquiera dar un hasta luego al Preikestolen para toparnos por última vez con el fiordo Lysefjord que dio como origen a la fotografía de la discordía (en el pie de este post explicamos el por qué la discordia)

Fotografía mojabragas de Manolito frente al fiordo Lysefjord

Es increíble que por mucho que mires a este fiordo, cuya definición al castellano sería algo así como “el fiordo de la luz”, siempre parezca distinto. Increíble.

Diario de un Mentiroso en el fiordo Lysefjord

Y desde allí, dijimos hasta luego al Preikestolen. Con esas maravillosas vistas. Un lugar que desde hacía años deseaba visitar. Habían sido muchos los días organizando la subida a uno de los lugares que como viajero más significaban para mi. No se explicar muy bien el por qué. Pero este sitio desde siempre me había resultado más que mágico.

Saltando por encima del fiordo Lysefjord

Eran cientos y cientos las fotografías que había visto de este lugar. Multitud de reportajes, anuncios y revistas del famoso Preikestolen. Y ahora, ese sueño como viajero, ya había sido hecho realidad 🙂

«A Diana y Manolito, mis compañeros durante este sueño viajero.»

Final de la ruta al Preikestolen

Información práctica si quieres vivir esta experiencia

¿Cómo llegar al Preikestolen desde Stavanger?

La manera más facil de llegar es con la empresa Tidereiser que tiene un combinado de ferry más autobús.

Rumbo a Tau en el ferry desde Stanvanger

De todos modos, para que os quede más claro, aquí os dejo un vídeo que hicimos donde en 30 segundos os lo explicamos súper fácil.

¿Cuánto cuesta el Ferry y el autobús?

El combinado de Ferry + BUS nos costó unos 245 NOK. Unos 28 leuros. Pero os recomiendo que miréis los precios actualizados en la web de Tidereiser.

Precios para el ferry y autobús que lleva a Preikestolhytta para subir al Preikestolen

¿Es muy dificil la subida al Preikestolen para niños o personas mayores?

Nosotros vimos a bastante gente con niños pequeños allá arriba. El tema del subir con carrito… hombre, yo lo evitaría porque como veis en el reportaje hay zonas con bastantes escaleras de piedras y puede suponeros un auténtico coñazo.

Padre e hijo realizando la ruta del Preikestolen

En cuanto al tema de las personas mayores, deciros que vimos a personas de absolutamente todas las edades en el Preikestolen pero si que es verdad que si tienes problemas de rodilla lo vas a pasar regular en algunas zonas como las de escaleras.

Perspectiva del Púlpito donde se aprecia increíble la altura de más de 600 metros

¿Qué quieren decir las prendas de ropa interior que se ven por el camino?

Debido a la fotografía de la discordia y a nuestro llamamiento desde redes sociales, miles de mujeres del planeta se han interesado por el bueno de Manolitor tras su publicación en Facebook de la célebre fotografía denominada como “mojabragas”. Un horror de término. Muy soez. Sí, lo se. Pero la naturaleza es caprichosa y la terminología popular también. En fin, aquí os dejamos el video causante de este hecho de que encontreis prendas por el camino al Preikestolen. Snoopy no por favor.

¿Cuánto se tarda en subir al Preikestolen?

Con paradas, fotografías y a un ritmo muy relajado se puede subir en 2 horas aproximadamente y la bajada en 1 hora y media.

¿Es peligroso acercarse al borde del Preikestolen?

Como con todos los lugares de este tipo… no hay que confiarse NADA. Es un lugar de riesgo y pese a que en toda su historia sólo ha habido una persona que se ha matado… cuidado. Mucho cuidado por favor. Este sitio no es ninguna broma ni sois los máquinas de la montaña por muchos árboles a los que os hayáis subido de pequeños.

Sentados en el borde del Preikestolen

¿Cuál es la mejor época para subir al Preikestolen?

Sin lugar a dudas en Verano. Los meses de Julio y Agosto son los mejores meses para viajar a Noruega dado que la cantidad de días de lluvia se reducen. Aún así, nunca estarás libre de un día nublado, de niebla o lluvia. Tendrás que estar al loro de la meteorología.

Lagos que encontramos camino al púlpito

¿Qué recomiendas llevar al Preikestolen?

Para un viaje de éxito al preikestolen recomiendo llevar:

  • Un par de botellitas de medio litro de agua
  • Una Gopro (consejazo)
  • Gorra
  • Un bocadillo de jamón
  • Bañador para los lagos
  • Seguro de viajes: Entre 6€ y 20€ con -5% de descuento que vereis aplicado en el precio al final de la reserva si reserváis desde aquí.
  • Abrigo por si refrescara
  • Dinero para el ferry + bus en efectivo
  • Prismáticos
  • Memoria y batería suficiente para fotos
  • Unas buenas botas con agarre de montaña.

Asomados en el Preikestolen

¿Cual es la mejor forma de moverse por la zona?

Lo ideal para moverse por Noruega es el coche de alquiler. Si queréis una web buena donde comprar precios lo suyo es que os metáis en la web donde yo busco coches que os comparará precios de todas las compañías de coches de alquiler en Noruega.

¿Dónde dormir cerca del Preikestolen?

Una de las mejores alternativas para domir cerca del Preikestolen es hacerlo en el Camping que hay junto a Preikestolhytta, otra opción es en Verkshotellet Jørpeland, a 8 kilómetros de Preikestolhytta y por último ya que miréis en Stavanger, donde las opciones son muchas y más baratas… Nosotros optamos por dormir en Stavanger porque tienes más opciones para comer, ver cosas, etc… Nos alojamos en Stavanger Vandrerhjem Mosvangen.

En nuestra habitación del alojamiento de Stavanger para ir al Púlpito

¿Es importante la meteorología para subir al Preikestolen?

La meteorología para subir al Preikestolen es vital. Un buen día allá arriba es súper importante. De hecho si dan lluvia o niebla ni lo intentéis. Lo mejor es que controléis el tiempo desde www.eltiempo.es o desde la web del tiempo en Noruega www.yr.no

Perspectiva por el lado derecho del Preikestolen

¿El mejor de los consejos para subir al Preikestolen?

El mejor de los consejos que os puedo dar es que disfrutéis al máximo pensando en todo momento que estáis en un lugar único. Un auténtico capricho de la naturaleza colocado ahí para dejar volar los sentidos. ¡Buen viaje!

Manolito sentado en el borde del Púlpito con todo el fiordo a la derecha y un fallal gigante de piedra

¿Dónde están todos estos lugares?

A continuación os coloco un mapa que he confeccionado con todos los lugares importantes a tener en cuenta para poder ir sin problemas al Preikestolen: Puerto de Stavanger, recorrido del ferry, puerto de Tau, recorrido del bus hasta Preikestolhytta y trekking de senderismo hasta el Preikestolen.